Había una vez una
familia de cerditos, que vivían en un pueblecito donde no había
mucho trabajo, y decidieron de salir a otro pueblo a vivir que
tuviera otros recursos mejores para poder trabajar. Llegaron al nuevo
pueblo y encontraron trabajo, pero tenían otro problema, tenían que
hacerse una casa cada uno.
El mayor de los cerditos se hizo la casa de ladrillos, el
mediano de los cerditos se hizo la casa de madera y el más pequeñito
se hizo la casa de paja.
De pronto vino una gran
tormenta, destrozó la casa del más pequeño y se tuvo que ir a la
casa de su hermano mediano. A los dos días vino un gran viento, y
destrozó la casa del mediano, entonces se tuvieron que ir a casa del
mayor, allí se quedaron una gran temporada, hasta que los dos se
hicieron unas casa de ladrillo como su hermano mayor, porque la
experiencia les enseñó que hay que hacer las cosas bien.
Colorín colorado ésta
narración se ha acabado.
Marta Gil 3º B
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